19 marzo 2016

93 días viajando…
5 días en Rangataua…

Hoy es el día que recibimos a los nuevos helpers. Y es que creo que no lo he contado, pero Susan ha aceptado a dos nuevos helpers, Damien, un francés de 23 años y Shophie, una francesa de 50 que ha vivido los últimos 21 en la India. Ambos vienen en el mismo bus desde Auckland. Últimamente todos los helpers que conozco son franceses.

Como “siempre”, me levanto a las 8 (y pico), y marcho para casa de Susan. Hoy no llevo zumo, porque se ha acabado la fruta. 

Allí hago mis saludos al sol y luego vuelta al Shed, ducha y empiezo a preparar el desayuno. Hoy hago un experimento: tortilla de patata, cebolla y queso. 

Lo hago friendo un ajo. Cuando empieza a dorar, añado la cebolla bien cortada. Cuando empieza a hacerse, añado la patata rallada (he probado a rallarla con un rallador grueso y luego la lavo para quitar el almidón, y la tortilla queda más suave y se hace más rápida), y mientras se hace, bato 5 huevos y le añado sal y queso chedar y parmesano rallados. Lo junto todo en el bol…

…y lo pasó a la sartén con un poco de aceite bien caliente. Lo siguiente ya es malabarismos para darle la vuelta y evitar que se pegue. 

Me queda de libro. 

Y a Susan le entusiasma. El queso le da un punto muy… anglosajón. 

Después de desayunar nos quedamos un largo rato charlando y planificando cómo vamos a organizarnos con los nuevos helpers. Le propongo hacer todas las mañanas un desayuno en común y ahí plantear y repartir las tareas del día. Le parece bien mi idea. 

El otro tema es como nos organizaremos el finde que viene, porque The Shed está reservado y va a ser ocupado por una familia. Con Damien no hay problema, porque sólo estará hasta el viernes. El tema es que nos tenemos que organizar Susan, Sophie y yo para dormir y para usar el único baño (el del estudio) y la mini-cocina de la casa de Susan. Pero serán sólo 4 o 5 días. En peores condiciones he estado. Por mi parte no hay ningún problema. 

A media mañana llega Wendy, la amiga de Susan, de visita y con sus dos mascotas, la perrita Rossie y el caballo enano Flicka. 

El caballo es una monada, la verdad. Hasta intenta comerse mi rodilla. 

Terminamos la mañana en casa de  Susan, donde le estoy ayudando con algunos temas informáticos (transferencia de un dominio, recuperación de la cuenta de Apple y similares…). Susan siente mucha curiosidad por leer mi blog (¡Hola, Susan!), así que me animo a hacer por fin algo que debería haber hecho hace tiempo, añadir un botón de traducción de Google. Por lo que veo, la traducción no está mal.

Susan se pasa el resto de la mañana descojonada (a ver cómo traduce Google esa palabra) de la risa, leyendo mi visión de lo que es Nueva Zelanda. Le hace tanta gracia que hasta me pide permiso para mandárselo a su padre. 

Y es que me imagino un chino que viene de visita a Madrid y que se pone a contar sus impresiones de la ciudad desde su particular punto de vista, sorprendiéndose de cosas que para nosotros son naturales, y claro… te partes. 

A las 15 toca ir a por los helpers. Conduzco yo. Paramos en la gasolinera para llenar el depósito y comprar algo de gasolina y aceite para la Whipper Snipper que acaba de recibir por correo y que le monté yo ayer (se me pasó comentarlo). Lo quiere usar para cortar la hierba. 

Después vamos a la parada de buses de Ohakune. Como viene con retraso nos tomamos un helado en el Storm Shelter Café Bar (Nueva Zelanda no destaca por sus helados). 

El café está al lado del Tribunal de Justicia…

…que tiene al lado lo que yo diría que es la prisión al aire libre… 😉

Saco alguna foto más de los alrededores…

Aprovecho para hacer foto de un mapa de NZ y del Parque Nacional de Tongariro. 

El Parque Nacional de Tongariro está formado por 3 volcanes: el Ruapehu (el más alto con 2.797m), el Ngauruhoe (2.291m) y el Tongariro (1.978). El Tongariro entró en erupción por última vez en 2012. Está aún caliente, vamos. Estas montañas son famosas, sobre todo, porque es donde se rodó en gran parte El Señor de los Anillos.

Hay un famoso Tongariro Alpine Crossing, de 20 Kms, que pasa entre el Tongariro y el Ngauruhoe. Pero el que yo quiero hacer y tengo que ver cómo hacerlo es el Tongariro Northern Circuit, que pasa por las tres montañas y que dura entre 3 y 4 días. Creo que sería toda una experiencia.

En el Storm Shelter, que además de bar es accommodation, tienen un mapa del mundo para que la gente ponga una banderita en su lugar de origen. Yo pongo la mía, claro. 

Finalmente llegan los franceses y nos vamos con ellos a comprar algo de comida: frutas, verduras, aceite, café… 

Aguacates no, que tiene un precio disparatado. 

De allí para The Shed, para que se instalen y tomarnos un té (aunque yo me hago una papilla de plátano, cacao, leche de almendras y canela). 

Allí nos cuenta Damien que se ha tomado 6 meses de descanso en sus estudios para viajar y aprender inglés, y Sophie nos cuenta cómo conoció una comunidad internacional en la India, que se fundó en 1968 a partir de las ideas del filósofo indio Sri Aurobindo, y cómo se fue a vivir allí hace 21 años. Allí se casó y allí tuvo dos hijos. 

No me da tiempo a escuchar mucho más, porque me toca ir a trabajar. Susan se ofrece a llevarme, así que dejamos a los nuevos helpers en casa de Susan para que tengan Internet, ponemos la bici en la camioneta y me lleva al pueblo. 

Allí nos tomamos un vinito antes de empezar… 

…y, a las 17:30 en punto, me enfrento a la pila de cacharros sucios que me esperan. 

A media jornada Cris me invita a un aperitivo…

La jornada vuelve a ser divertida e interesante. Incluso ayudo un poco en la cocina, poniendo mantequilla en los panes que irán al horno.

Ahí es donde te das cuenta en la gran diferencia entre la cocina anglosajona, que se basa mucho más en la mantequilla, los fritos y la carne, y la cocina mediterránea, que se basa en el aceite de oliva, los crudos y las verduras. Lamentablemente nos vamos yendo cada vez más a la anglosajona, a pesar de que todo el mundo sabe que es mucho peor. 

Luego me toca cortar el camembert y ponerlo en tuppers, al igual que las aceitunas.

Y en uno de los momentos de más prisas hay un error con unas pizzas, porque habían pedido pizzas carnívoras y se les ha dado vegetarianas, así que me piden que prepare yo dos pizzas. No me es difícil, por mi experiencia en el Tomato Festival de Peace Farm. Aunque toda mi alma vegetariana se revuelve al tener que preparar una pizza con todos los tipos de carne y embutidos que tenemos… puaj. 

Pero no me queda mal, todo hay que decirlo. 

Y tenemos dos pizzas vegetarianas para matar el gusanillo mientras curramos. 

El resto de la jornada es lavar y lavar, y guardar y guardar. Hoy me hago 4 horas, hasta las 21:30. 

Es triste la cantidad de comida que se tira…

Cuando termino me hago mi propio plato de comida, con unas verduras, puré de patatas y salsa de champiñones. Junto con una ensalada y una cervecita. 

No sólo me estoy ganando un dinerillo, sino que además me voy cenado. 

Aunque me dice Leticia si no me importa pasarme mañana a cobrar. Por mí sin problema, claro. También me ofrecen repetir la jugada el finde que viene… Porsupu!

Otra vez me toca volverme en bicicleta, pero esta ve pruebo por la carretera principal y se me hace un poco más corto, aunque da la impresión de que todo el camino es cuesta arriba.

Por fin, 5 Kms más allá, llego a la salida de Rangataua. 

Aquí uno se puede hacer una idea de la oscuridad del sitio. 

Llego a The Shed sano y salvo, y no tan cansado como debería. Y es que vuelvo a ser yo, sin dolores musculares, ni cansancio. Me siento físicamente genial y fuerte. Lo echaba de menos. Obviamente no puedo abusar con el trabajo físico. 

Por la mañana llamé desde el teléfono de Susan al centro de Vipassana para que me hicieran el “language check”. Me atiende una chica muy simpática con la que tengo una agradable conversación y me dice que mi nivel de inglés es bueno (¡yeah!), pero que aún así, la grabación que nos van a poner todas las noches de un monje budista, tienen versiones en todos los idiomas hechos por voluntarios y que me la darán en español. Pero que les preocupa mucho que pueda seguir las instrucciones para meditar de los guías. Que si tengo dudas, que no dude… en preguntar. 

Me dice que sigo en el proceso de inscripción y que tendré noticias por mail en los próximos días. 

Así que parece que va ser un sí o sí. Se acabó el boicotearme para no hacerlo. Ya no hay excusas. La reserva es para el 20-30 de abril. 

Mi idea es estar hasta entonces (un mes justo) en la isla norte, intentado recorrerla lo más que pueda. E ir a la isla sur después del Vipassana. Así tendré mes y medio para hacerme esa isla, hasta mi vuelo del 12 de Junio hacia las Islas Cook. 

Lo que me acojona es el frío que puede llegar a hacer en mayo/junio, especialmente en la isla sur. No voy nada preparado. Pero, en fin, cono todo… ya se verá. 

Otro de los sitios a los que me encantaría ir es a:

Realmente no es ningún sitio turístico. Es el punto opuesto exacto a mi casa de Madrid. 😀

Y no está demasiado lejos de donde estoy ahora.

Tiempo tengo de sobra. No tengo otra cosa que hacer… 😉