11 enero 2016
25 días viajando…
21 días en Tasmania…
Hoy me he levantado un poco tarde (ha vuelto a no sonar el despertador. Yo ya no sé de qué depende). Cuando miro la hora son las 8:15. Sarah ya está levantada y activa.
Hago café y una tortilla de sweet potato (también conocida como batata o boniato). Queda mucho más suave y dulce que con patata. Lástima que se me olvida hacerle la foto. A Sarah le encanta. Dice que es un regalo tener un helper que cocina. Al parecer con anteriores helpers (lleva 5 años cogiendo helpers) le tocaba a ella siempre cocinar.
Antes de irse a Hobart a hacer unos recados, me pone mis deberes. La tarea de hoy es quitar la tierra que hay detrás del cobertizo para intentar nivelar el terreno, y así la lluvia no se vaya toda contra la pared. Para ello voy sacando la tierra con la pala, poniéndola en una carretilla…
Y llevándola a una zona donde la amontonamos para su posterior uso como sustrato, ya que es una tierra muy fértil.
Además corto un poco las ramas de los árboles que caen sobre el tejado.
Antes…
…y después.
Creo que en la foto no se aprecia mucho la cantidad de tierra que he sacado, pero se aprecia más cuando se ve dónde la he dejado.
La otra tarea, que algo se adivina en las fotos anteriores, es quitar la valla que hay en el lateral del cobertizo y con ella toda la maleza acumulada. Dejamos los postes por si queremos volver a poner la valla.
En las siguientes, las fotos del “antes” las saqué cuando ya había empezado a quitar la maleza.
Antes…
…y después.
Antes…
…y después.
Ha sido un currazo de toda la mañana, pero ha quedado bastante bien. Mañana vendrá Álex, el constructor que nos va a ayudar a convertir el cobertizo en una habitación para helpers.
Echo un vistazo a las gallinas. Aún cacarean algo desconfiadas, como diciendo… “¿de verdad que ahora vivimos aquí?”
Ayer era la risa, porque al parecer el estatus social lo miden por quién se pone más alto, y había que ver cómo se intentaban poner todas en la puerta del gallinero, y la que armaban.
Pensábamos que con el estrés del cambio tardarían más, pero hoy han dado 6 huevos!
Como son más de las 14h y Sarah no ha vuelto, empiezo a cocinar. Me hago unas lentejas rojas y arroz…
…y no me quedan mal.
Cuando llega Sarah, se prepara una ensalada, coge algo de mi arroz y se lleva a las niñas (Ella está con sus amigas Lucy y Amalia) al Waterhole. Yo me quedo a descansar un poco.
Algo más tarde me voy a recoger Camomilas, que si dejo pasar los días, florece tanto que se acumula el trabajo.
Y después termino una tarea que se me había olvidado, quitar el enrejado de madera para enredaderas que había en el cobertizo. Se ve en la foto de los primeros días…
Y ahora…
Misión cumplida.
Como esta noche Ella duerme en casa de su amiga Lucy y Max en casa de un amigo, Sarah aprovecha para estudiar. Ha vuelto a la universidad y aprovecha los huecos que tiene sin niños para ponerse al día, siguiendo unas clases que hay en Internet.
Eso quiere decir que no puedo usar Internet. Como tiene modem en vez de router sólo hay un cable para usar por turnos, así que para poder escribir el blog me marcho a la Fern Tree Tabern a tomarme una “caña” y poder escribir un rato, ya que ahí tienen Free WiFi.
(Sí, vale, estaba con facebook en ese momento… :-p)
Y al cabo de un rato me pasa una de las cosas más sorprendentes y buenrolleras que me han pasado desde que estoy aquí. Entra una chica en la Taberna (a esas horas estoy prácticamente solo), con ojos preciosos y cierto parecido a Ashley Judd, se me acerca y me dice…
– We have a fire and a wine in the park… do you want to join us?
Le digo que sí, que por supuesto, que me dé unos minutos para cerrar lo que estaba haciendo. Ella se va, salgo de la Taberna y la veo a lo lejos indicándome y veo el humo de la fogata…
Y ahí me encuentro con Sarah (la chica que me ha hecho el ofrecimiento) y Mish, dos chicas de Melbourne que han venido a pasar unos 10 días en Tasmania de mochileras.
Y pasamos un rato de lo más agradable. El sitio es una especie de merendero abierto (aunque en la foto parezca una cabaña) al lado de los servicios del parque, con una mesa y chimenea, con leña a disposición de la gente. Da gusto este país. La foto nos la hace una colombiana de camino a los servicios.
Ellas me cuentan que van a dormir en el bosque esta noche, que se han cogido unos días para conocer esta zona. Yo les cuento mi experiencia HelpX y les parece una manera ideal de viajar. Hablamos de todo, de España, de política, de nuestras vidas… Mish ha estado en Madrid y Barcelona.
Las cosas que me cuentan de Melbourne me hacen tener más ganas aún de conocerlo. Voy a ver si encuentro algún HelpX por ahí entre Febrero y Marzo.
Es impresionante lo que me facilita el vino la comunicación en inglés. Nunca me he visto tan fluido en una conversación… 😉
Sobre las 21h, cuando veo que Sarah se está quedando dormida…
…me despido de ellas. Intercambiamos facebooks y me dicen que mañana volverán a estar por ahí a la misma hora. Van a subir al Monte Wellington por el día, algo que les recomiendo sin duda.
Yo no sé si es que en este país la gente es maravillosa, o es que estoy en un momento en que atraigo cosas buenas, pero me ha encantado esta forma de conocer gente, esta espontaneidad para ofrecer compartir un vino con un desconocido.
Ha empezado a llover, pero yo me voy a la cama con una sonrisa. 🙂
1.-Desde luego la casa de Sarah se la estas dejando niquelada 😀 No va a querer que te vayas con tu iniciativa, que le cocines y con todo tu trabajo
2.-¡Como mola los encuentros amistosos y espontáneos!